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28/Oct/2014

Si Ud. es una mujer embarazada de término y por cualquier circunstancia se le debe realizar una operación cesárea o cualquier otro procedimiento que ayude al feliz nacimiento de su bebé, es importante que sepa que los objetivos prioritarios de todo el equipo médico que la atenderá durante la intervención son el preservar su seguridad y bienestar al igual que la de su hijo.

Todos los anestésicos que se le administrarán están destinados a cumplir con estos objetivos fundamentales. De esta manera no sentirá el dolor que pueda ocasionarle la operación y su hijo nacerá con toda su vitalidad y en perfectas condiciones físicas.

Si Ud. lo desea y su obstetra así lo indica, existe la posibilidad de que el médico Anestesiólogo puede aliviarle el dolor durante su trabajo de parto empleando a tal fin un tipo de anestesia regional (la anestesia peridural con catéter) administrándole pequeñas dosis anestésicas locales para aliviarle el dolor que el trabajo de parto pueda generar.

Es preferible que discuta esta posibilidad con su médico Ginecólogo  en el último trimestre de su embarazo a fin de que conjuntamente con el Anestesiólogo se planifique con antelación la aplicación del procedimiento antes mencionado.

Analgesia del Parto

Durante el trabajo de parto se producen contracciones dolorosas, que pueden llegar incluso a ser insoportables, las cuales pueden transformar la experiencia en desagradable para la mayoría de las madres, así como producir consecuencias adversas en el feto derivadas de la respuesta del organismo de la madre al dolor

Existen varios métodos para aliviar este dolor. Los integrantes del equipo asistencial pueden elegir cualquiera de estos métodos de acuerdo a la situación clínica.

El bloqueo peridural (o epidural) es la técnica más utilizada en la actualidad. Consiste en la administración de un anestésico local a nivel de la columna lumbar a través de un fino catéter que se deja colocado en la espalda de la madre durante todo el trabajo de parto. El anestésico local produce un bloqueo de las raíces nerviosas que traen la sensación dolorosa desde el útero y el canal de parto lográndose el alivio completo del dolor sin afectar la capacidad de pujar de la madre.

Durante el trabajo de parto con analgesia peridural se realizan controles clínicos, se evalúa la intensidad del dolor de las contracciones percibida por la madre y se monitorizan con aparatos las frecuencias cardíacas materna y fetal y la presión arterial materna.

Esta técnica de control del dolor del trabajo de parto no afecta a la madre ni al feto si no ocurre una disminución significativa de la presión arterial, lo cual se presenta con poca frecuencia y puede ser controlado rápidamente por el Anestesiólogo.

Estudios científicos muestran que los recién nacidos de madres que recibieron analgesia peridural durante el trabajo de parto presentan menores valores en los marcadores de sufrimiento fetal con respecto a los que recibieron analgesia intravenosa, así como no muestran diferencias en los parámetros de vitalidad fetal como el test de Apgar (puntajes del 1 al 10 que se le da al recién nacido de acuerdo a su vitalidad al minuto y a los cinco minutos de vida).

El fallo de la técnica, sin alivio del dolor o con analgesia insuficiente o parcial, puede considerarse también una complicación y es poco frecuente ocurriendo en el  2 a 5% de los casos.

Otra complicaciones que pueden ocurrir son: nivel analgésico muy alto, un bloqueo neuromuscular excesivo que impida la correcta movilización de los miembros inferiores o disminuya la capacidad de pujar, retención urinaria postparto, dolor de espalda y dolor de cabeza postparto. Todas estas complicaciones en general ceden espontáneamente, se controlan con analgésicos comunes o no requieren tratamiento alguno.

Las contraindicaciones de ésta técnica son:  las alteraciones de la coagulación, las infecciones de la piel de la espalda en la zona donde se coloca el catéter y el aumento de la presión intracraneana por enfermedades del sistema nervioso central. No debe realizarse en pacientes incapaces de comprender la técnica que impidan su colaboración o que tengan dudas acerca de la aceptación del procedimiento.

Esta técnica no debe ser realizada por técnicos sin los conocimientos, el entrenamiento y la experiencia adecuados.


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28/Oct/2014

Todas las intervenciones quirúrgicas y todas las anestesias conllevan algún tipo de riesgo, el cual es muy variable dependiendo, sobre todo, del tipo de intervención y del estado físico previo del paciente. Afortunadamente, los accidentes graves son excepcionales –a pesar de que tienen una gran repercusión social y mediática.

Las complicaciones relacionadas con la anestesia han descendido notablemente durante los últimos 20 años, coincidiendo con la incorporación de medicaciones más potentes y seguras y sofisticados sistemas de control y monitorización. Asimismo, se ha reducido de forma dramática el número de muertes atribuidas a la anestesia.

Actualmente se calcula que el riesgo de muerte directamente causada por la anestesia es de un caso por cada 200.000 procesos. Este riesgo es muy inferior al de sufrir un accidente grave de tránsito.

Los Anestesiólogos están entrenados para enfrentar complicaciones que puedan comprometer la vida o la integridad de sus pacientes y prevén la disposición de los medios, así como los planes de contingencia necesarios ante la posibilidad de que se presente un evento adverso con la finalidad de contrarrestar o minimizar sus consecuencias.

En todo caso, cada paciente y cada intervención conllevan un riesgo específico.

Converse con su Anestesiólogo sobre las complicaciones particulares que pueden asociarse con la intervención a la que se someterá


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28/Oct/2014

Sí, con algunas reservas. Hay intervenciones que se pueden realizar con diferentes tipos de anestesia, pero en otras no existe esa posibilidad de elegir.

Su anestesiólogo, tras estudiar su caso particular, le explicará las opciones que tiene, y las ventajas e inconvenientes de cada una de ellas, aconsejándole cuál de las técnicas es más adecuada a su caso.


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28/Oct/2014

Los Anestesiólogos son profesionales médicos altamente capacitados, que saben emplear una gran cantidad de agentes y técnicas para mantenerlo libre de dolor durante la operación.

La selección final del agente anestésico se basa fundamentalmente en el tipo de operación que le será efectuada, en su historia clínica previa, y en los datos que obtendrá el Anestesiólogo durante la consulta preanestésica y otras circunstancias, entre las cuales pueden incluirse sus preferencias. En esencia hay tres tipos principales de técnicas anestésicas:

Anestesia general

La anestesia general, duerme todo el cuerpo. Ud. perderá la noción y el recuerdo de las cosas que lo rodean o que sucedan durante el acto operatorio. Este efecto se logra administrando un número variable de fármacos (a veces más de una docena) algunos de estos por vía intravenosa y otros se inhalan en forma de gases o vapores produciendo rápidamente sueño en una forma suave y placentera.

Para su tranquilidad, un dato importante que debe recordar, es que el Anestesiólogo NUNCA administra “más anestesia” de la necesaria.

El Anestesiólogo busca el resultado deseado, calculando permanentemente las dosis en forma muy exacta, para ajustar el nivel de anestesia a las necesidades de la intervención y a las características de cada paciente.

En la Anestesiología moderna no tiene cabida la expresión “lo pasaron de anestesia”.

Frecuentemente, con el fin de que los pulmones reciban suficiente oxígeno, el Anestesiólogo colocará un tubo a través de su boca hasta alcanzar la parte superior de su aparato respiratorio. Este procedimiento lo realizará el Anestesiólogo cuando Ud. esté dormido y por lo tanto no tendrá ninguna sensación ni recuerdo de su colocación. De la misma manera el tubo le será retirado antes de que esté despierto, salvo la posibilidad de que quede con tubo, cosa que le será informada, por lo cual, tampoco en dicha oportunidad, percibirá nada extraño que le produzca sensaciones desagradables o incomodidad, las pequeñas molestias que la colocación del tubo pueda ocasionarle después de la operación (un poco de ardor en la garganta al tragar) son insignificantes en comparación con los beneficios que su colocación aporta a la seguridad de su oxigenación durante la operación.

Una vez finalizada la intervención, el anestesiólogo revierte el efecto de la medicación anestésica y el paciente recobra la conciencia y el control de sus funciones vitales, en un plazo más o menos largo que varía según el paciente y la intervención.

Anestesia regional.

La anestesia regional consiste en producir la insensibilidad de una región del cuerpo y no la de su totalidad.

Para ello, el Anestesiólogo inyecta una determinada solución de anestésico cerca de los nervios que reciben la sensibilidad de dicha zona.

Hay diversas técnicas, dependiendo de la zona a operar, pero las más empleadas son la peridural (o epidural) y la raquídea (o espinal), en las cuales el anestésico se inyecta en el canal medular que forma parte de la columna vertebral, mediante una punción en la espalda y se anula la sensibilidad de la parte baja del cuerpo.

De esta manera Ud. puede permanecer despierto si así lo desea, o si el Anestesiólogo considera que es lo más apropiado y seguro para su caso. Pero de cualquier manera, no sentirá ningún dolor proveniente de la zona operatoria. Aunque no esté totalmente dormido el médico Anestesiólogo vigilará sus condiciones clínicas tan fielmente como durante una anestesia general.

Anestesia local.

La anestesia local consiste en inyectar anestésicos directamente sobre los tejidos de la zona que se va a intervenir.

Se emplea para intervenciones menores sobre partes muy circunscritas, como la mano, el pie o el ojo.

Ud. seguramente habrá recibido este tipo de anestesia para un tratamiento odontológico.

Generalmente la aplica el propio cirujano y Ud. permanecerá despierto y alerta durante el acto quirúrgico.

 Si el cirujano considera que su seguridad o tranquilidad lo requiere, podrá contar con la asistencia del médico Anestesiólogo quien estará a su lado para vigilar su estado físico exactamente igual que lo hace durante una anestesia regional o una general. Al igual que durante una anestesia general puede recibir sedantes por vía intravenosa para tranquilizarlo durante la operación.

También el Anestesiólogo puede considerar conveniente hacerle inhalar un paco de oxigeno con una máscara o con un pequeño tubito plástico que se le colocará cerca de la nariz.


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28/Oct/2014

Una vez que Ud. ha quedado inconsciente, el anestesiólogo comienza con una parte realmente delicada de su trabajo, que consistirá en controlar sus constantes vitales y tratar cualquier alteración que se produzca en su estado físico durante la intervención.

Las funciones vitales se controlarán durante la anestesia de acuerdo a las normas más estrictas de seguridad según protocolos internacionales y nacionales establecidos por las instituciones representativas de los Anestesiólogos.

Para esta función, emplearemos una variedad de avanzados aparatos electrónicos que permiten medir y vigilar las reacciones de su organismo a la anestesia y la cirugía. Así por ejemplo, serán monitorizados su presión arterial y la frecuencia cardíaca, la eficacia de su respiración, y el contenido de oxígeno en su sangre, la cantidad de líquidos que se le administren, el electrocardiograma y la actividad de su corazón latido a latido, etc. El médico Anestesiólogo tomará las decisiones apropiadas para que todo el procedimiento se desarrolle sin inconvenientes, de acuerdo a las necesidades quirúrgicas.

Una vez concluido el procedimiento quirúrgico, se retira la medicación anestésica y se revierten sus efectos.

Durante la fase de recuperación o despertar, el anestesiólogo iniciará el tratamiento necesario para atenuar el dolor y las molestias del postoperatorio.


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28/Oct/2014

La anestesia altera sus reflejos normales, de forma que algunas defensas de su organismo dejarán de funcionar.

Por ello es necesario que su estómago esté vacío para evitar que restos de alimentos puedan volver a la boca y entrar en las vías respiratorias.

El Anestesiólogo le indicará cuánto tiempo debe guardar el ayuno y qué es lo que puede tomar –por ejemplo, alguna medicación con un sorbo de agua-.

Por su propia seguridad, es muy importante que siga estas instrucciones exactamente, de lo contrario puede ser preciso posponer la intervención.


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28/Oct/2014

Puesto que la anestesia y la cirugía pueden alterar en mayor o menor medida los procesos fisiológicos de su organismo, su Anestesiólogo debe conocer lo más exactamente posible cuál es su estado de salud.

Para ello le preguntará por las enfermedades que ha padecido, la medicación que toma regularmente, posibles alergias, consumo de alcohol, tabaco y otras drogas, etc.

Es muy importante que Ud. responda fielmente a estas cuestiones y siga las instrucciones del Anestesiólogo para su preparación preoperatoria.


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28/Oct/2014

Muchas personas que han tenido que someterse a una intervención quirúrgica probablemente no han llegado a conocer a su anestesista (o Anestesiólogo, que es el término correcto), a pesar de que su trabajo resultó de vital importancia para su seguridad y el buen desarrollo de la intervención. Para ellos sólo fue un doctor (muchos ni siquiera están seguros de que fuera un médico) que le hizo dormir de pronto y después le despertó, sin que sepan con claridad cuál fue su misión entre esos dos hechos que constituyen todo su recuerdo de la anestesia.

La Anestesiología es una especialidad médica, para la cual además de los años de estudio en la Universidad para graduarse de médico, se requiere tomar un curso especial de 4 años, incluyendo en el mismo una Residencia Médica Hospitalaria a la que se accede únicamente a través de un concurso de oposición. Durante el período de Residencia, el futuro Anestesiólogo es sometido a evaluación continua de su formación, exámenes periódicos semestrales y varias pruebas finales teóricas y prácticas que debe aprobar  para obtener el título de la especialidad. De esta manera, para recibir el título habilitante de Anestesiólogo, el aspirante a la especialidad debe estudiar 12 años para graduarse.

Durante este tiempo, el futuro Anestesiólogo aprenderá el manejo de fármacos y del instrumental propio de la especialidad y adquirirá conocimientos sobre temas de Cardiología, Neumología, Neurología, Terapia Intensiva, etc., con el objeto de actuar en la forma más eficiente para el control clínico al que será sometido durante la operación.

Ello permite al Anestesiólogo interpretar correctamente los datos contenidos en su historia clínica, los análisis de laboratorio que la acompañan, las radiografías, el electrocardiograma, etc.

El papel primordial del Anestesiólogo dentro del quirófano va mucho más allá de «dormir» a los pacientes, y consiste no solo en elegir el tipo de anestesia más apropiada para Ud. según sus condiciones físicas y el tipo de operación  a la que se someterá, sino que tiene como misión proteger y regular sus funciones vitales de forma que la intervención quirúrgica le ocasione las menores alteraciones posibles. Estos especialistas son, de hecho, los doctores encargados de diagnosticar y tratar cualquier problema o incidente médico que surja durante la intervención o en el período inmediatamente posterior.

El Anestesiólogo es concebido actualmente como el especialista «perioperatorio», esto es, el encargado del cuidado médico del paciente a todo lo largo de su proceso quirúrgico. Ello incluye el estudio y preparación del mismo antes de la intervención (preoperatorio), la supresión del dolor y la vigilancia de las constantes vitales durante la cirugía (intraoperatorio), y la continuación de estos cuidados una vez finalizada la intervención, hasta que el paciente está en condiciones de volver a la sala de hospitalización (postoperatorio), todo ello manteniendo una comunicación permanente con el equipo de cirujanos.

Actualmente, la legislación de nuestro país no permite la práctica de la Anestesiología a enfermeros o personal sanitario técnico no médico.


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28/Oct/2014

El término Anestesia significa privación total o parcial de la sensibilidad por causas patológicas o provocada con finalidad médica.

La Anestesiología es la ciencia médica que se ocupa del alivio del dolor y el cuidado global del paciente quirúrgico antes, durante y después de la cirugía.

Dentro de las condiciones de seguridad que le ofrece la tecnología y la ciencia médica actuales, Ud. podrá ser operado sin percibir ningún tipo de dolor, permanezca o no despierto durante la anestesia, independientemente del tiempo que dure su intervención.

En la actualidad, nuestra Especialidad incluye otras muchas áreas de actuación además del quirófano, entre las que están el tratamiento del dolor, procedimientos diagnósticos y terapéuticos fuera de sala de operaciones que requieren sedación y/o analgesia (Tomografía, Resonancia Nuclear Magnética, Endoscopía, etc.) el manejo de cuadros clínicos críticos y situaciones de emergencia dentro y fuera de los hospitales.


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28/Oct/2014

Los Anestesiólogos sabemos, porque así nos lo comunican muchos pacientes, que gran parte de la preocupación y miedo que se siente al enfrentarse a una intervención quirúrgica está causado por la anestesia y no por la propia intervención.

Sin duda, el responsable de esa sensación de miedo es la desinformación y el desconocimiento que la mayoría de las personas – incluidas muchas del ámbito sanitario- tienen de nuestra Especialidad.

Como médicos, nuestro objetivo es proporcionarle el mejor cuidado posible, y estamos convencidos que la mejor atención médica es la que se realiza sobre un paciente confiado, tranquilo y cooperador.

Este documento ha sido preparado para ayudarle a comprender en qué consiste la Anestesiología moderna. En él creemos que encontrará las respuestas a la mayoría de sus dudas, pero seguramente no a todas; por ello le instamos a que consulte con su Anestesiólogo cualquier preocupación que tenga.

El objetivo de la información que se suministra en ésta sección es ayudarle a comprender en que consiste la Anestesiología moderna, aclarándole aspectos básicos vinculados con la atención anestesiológica que recibirá durante su cirugía o procedimiento diagnóstico.

Se recomienda que analice y discuta el contenido de este informe con sus familiares para que en la consulta preanestésica o en el momento previo a la cirugía, donde conocerá a uno de los integrantes del equipo de Anestesiólogos de la institución en que se asiste, pueda profundizar los aspectos que lo preocupan particularmente o sobre los que tiene dudas y que considera conveniente aclarar.


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La “Sociedad de Anestesiología del Uruguay» (S.A.U.) es una sociedad sin fines de lucro fundada el 9 de enero de 1948, con domicilio legal en Montevideo, y con personería jurídica desde el 24 de marzo de 1954.

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